martes, 29 de enero de 2013

Julián Axat, un largo silencio


CAVILACIÓN ANTE EL PUENTE GENERACIONAL

Cuando lo vi entrar se produjo un largo silencio

... y entonces vi encerrado todo el valor que yo no tenía
el que no tenía ninguno de mis hermanos para emprender
la empresa de absoluto que tenían nuestros padres antes de desaparecer
y aun cuando él ni siquiera iba saber de qué hablaba
observé el aura de sus pupilas titilando pero vaciándose lentas
en su desenfreno jugándose todo era Dios jugando a los dados
con tendencia a ser nada
y mis hermanos mayores 
pero sobre todo nosotros hijos absortos pusilánimes tan cobardes conservadores
condenados como espectadores de esta nueva destrucción
acaso ilusionando una pizca de esa fuerza o valor volviéndose a posar
ya ni siquiera sobre nosotros o uno de ellos
sobre nuestra descendencia no nacida ni arrasada
soñando el mismo sueño a tropezones
esperando o desenterrando tesoros de aire inflamable
postas dejadas en el tiempo interferidas por el abandono


- Ey! - me dijo-, me aconseja que declare o no?


.

No hay comentarios:

Publicar un comentario